Google podría estar enfrentando otra decisión en una investigación antimonopolio en la UE, según un nuevo informe de Reuters, que incluye una multa que podría superar los $ 2.7 mil millones. La noticia llega solo unos días después de que la UE finalizara una multa récord de $ 2.7 mil millones sobre las prácticas de Google que involucran anuncios de compras en la búsqueda. Sirve para razonar, entonces, que una multa por algo tan grande como los términos de licencia de Android seguramente sería mayor que uno para una cierta parte de los resultados de búsqueda.
Según los informes, la UE está formando un panel especial de expertos para investigar más a fondo las prácticas de Google sobre la concesión de licencias del sistema operativo Android a los fabricantes, que según afirma es de naturaleza anticompetitiva. Si esta discusión suena familiar, es porque en realidad se deriva de una investigación sobre el asunto en abril de 2016. Las discusiones sobre Google abusando de su dominio del mercado han durado mucho más que eso.
La lucha en curso por las licencias de Android en la UE finalmente puede conducir a daños financieros.
Los reguladores de la UE afirman que los términos de Google para otorgar licencias de Android, que requieren que se cargue un conjunto específico de aplicaciones de Google en el teléfono y evitan que los fabricantes creen dispositivos Android sin los servicios de Google, son anticompetitivos y, en última instancia, perjudican a las empresas. El argumento de Google, naturalmente, es que esos fabricantes son libres de fabricar teléfonos utilizando la compilación de código abierto de Android y sus propios servicios si así lo desean. A diferencia de otras regulaciones antimonopolio, como las de los EE. UU., La UE no necesariamente tiene que mostrar un abuso del poder de monopolio para imponer una multa, como lo ha demostrado en casos anteriores.
Los informes afirman que la Comisión Europea podría llegar a una decisión sobre el asunto antes de fin de año. Además de otra multa masiva, también podría obligar a Google a cambiar los términos de la licencia de Android para cumplir con las demandas de la UE de competencia en el espacio móvil. Dadas las recientes decisiones contra Google, la posibilidad de otra decisión de este tipo ya no parece tan descabellada.